Vivimos en una era de transformación digital constante en donde la capacidad de adaptación es un recurso clave para la supervivencia.
Ante esta evidencia, muchos perfiles directivos han sabido reaccionar a tiempo encontrando en la formación las piezas clave para re-enfocar sus objetivos profesionales y empresariales.
Por otra parte están los que se han quedado anclados a tiempos pasados en los que los directivos seguían modelos tradicionales de liderazgo. La formación estaba destinada a los miembros de sus equipos pero no a ellos.
¿De qué opinión eres tú?
En el post de hoy vamos a exponer los principales motivos por los que un perfil directivo debe de permanecer en formación constante a lo largo de toda su carrera.
¿Por qué formarse con un MBA?
Un MBA es un programa formativo que abarca diferentes disciplinas dentro de la empresa de una forma global.
El objetivo es ampliar los conocimientos teóricos y prácticos del que los realiza en las principales áreas de cualquier organización: finanzas, RRHH, marketing, ventas, estrategia, etc.
Además también se entrena lo que se conoce como “habilidades blandas” relativas a la comunicación y liderazgo, aptitudes fundamentales para el éxito profesional.
Contar con un Master en Administración de Empresas (MBA) marcará un antes y un después en la vida laboral de cualquier profesional ya que implica diferenciación y progreso que se traduce en una apertura de puertas con vistas a interesantes oportunidades profesionales.
Además, si ya formas parte del equipo de una compañía, te ayudará a promocionar dentro de la misma pudiendo optar a una mejor retribución salarial.
Es lo que se conoce como refuerzo a la empleabilidad.
¿Qué imagen transmite un profesional que ha realizado un MBA?
Cualquier organización que se precie querrá tener entre sus miembros a los profesionales mejor formados. Poseer un MBA es un síntoma de interés por la propia formación y desarrollo laboral.
¿Cuáles son los beneficios que se obtienen tras cursar un MBA?
- Es una potente herramienta para acceder al mundo laboral.
- Mejorará tu productividad en el puesto de trabajo (capacitación).
- Mayores rangos retributivos.
- Un salto en tu carrera.
- Oportunidades profesionales.
Los conocimientos adquiridos en un MBA proporcionan herramientas que permiten resolver situaciones profesionales complejas con éxito.
¿Cuál es la base de la formación a directivos?
En un entorno tan cambiante como el actual, las empresas necesitan adquirir una mayor flexibilidad para poder adaptarse a las nuevas necesidades.
Uno de los principales efectos de la globalización es el incremento de la competencia que trae consigo una reducción de precios. Esto provoca que los márgenes de beneficio tengan que ajustarse al máximo afectando directamente a la rentabilidad.
DOS GRANDES RETOS DENTRO DE LA DIRECCIÓN EMPRESARIAL
1- Reflexión y análisis en diferentes escenarios
Diferentes escenarios deben de tener distintas soluciones, por lo que aprender a reflexionar y analizar cada situación que afecte a la empresa potenciará la innovación y la creatividad.
2- Negociación, liderazgo y dirección
Negociar, liderar y dirigir son tres acciones presentes en el día a día de cualquier directivo. Las personas que formen los equipos y la gestión de sus talentos serán la pieza angular de cualquier compañía.
¿Por qué los perfiles directivos necesitan formarse en creatividad?
Por lo general, los perfiles directivos suelen ser bastante reacios a formarse en creatividad.
Uno de los principales motivos suele ser porque para ser creativo es necesario salir de la zona de confort y el “miedo al ridículo” delante de los equipos suele ser la principal objeción.
También existe una cuestión de mentalidad. Hay perfiles directivos que piensan que los que deben de tener las ideas son los miembros de su equipo y ellos actuar como impulsores de su creatividad.
Si no somos creativos ¿cómo vamos a valorar esta aptitud?
La creatividad ya no es el futuro sino el presente. Las nuevas tecnologías, equipos y maquinaria realizan el trabajo mecánico mientras que las personas hacemos el relacionado con el talento humano, la creatividad, las ideas, las emociones.
Las máquinas y los equipos no salvarán a la empresa de una crisis pero las personas sí pueden hacerlo.
Una empresa no crecerá si las personas que la forman no lo hacen con ella, de la misma forma que no será capaz de generar valor si el cliente no lo percibe.
La formación a directivos debe de tener tres pilares:
- Conciencia global.
- Rápida adaptación a los cambios.
- Apuesta clara por las personas que la integran.
Por último aclarar que un Master MBA ampliará tu círculo de relaciones personales y profesionales dentro de tu sector de actividad.