Inteligencia económica y competitiva

Qué es la Inteligencia Económica y Competitiva

Con frecuencia se habla del concepto de Inteligencia Económica e Inteligencia Competitiva en el ámbito empresarial como si fueran sinónimos. Es importante tener en cuenta las diferencias fundamentales entre ambos, ya que aunque pueden tener importancia para el análisis empresarial orientado a la toma de decisiones, son dos disciplinas diferentes.

En este post te mostraremos qué es la inteligencia económica y qué es la inteligencia competitiva, el papel que desempeña la seguridad económica en un país o zona geográfica y los ciclos o fases de la inteligencia competitiva en las empresas.

Conceptos: diferencia entre Inteligencia Económica y Competitiva

La Inteligencia Económica hace referencia al análisis de la información de un determinado contexto económico, tecnológico y social en un área geográfica. Normalmente, se enfoca en el análisis de un país, aunque también puede realizarse un análisis a nivel estatal o comunitario en los grandes espacios geográficos.

Este tipo de análisis trata de explicar cómo afecta el entorno económico a la competitividad empresarial. No está enfocado en analizar las amenazas y oportunidades de una empresa en específico, sino del espacio de mercado en un ámbito geográfico. Así, por ejemplo, la Inteligencia Económica estudia los datos macroeconómicos, las políticas fiscales, las estructuras administrativas y el potencial tecnológico de un país o región.

El papel de la Inteligencia Económica puede tener una gran utilidad para la internacionalización de empresas o para aquellas organizaciones que desean expandirse a otras regiones económicas. Estudiar el entorno económico en dichos espacios ayuda a evaluar la idoneidad de desarrollar una estrategia en dicho entorno.

En cambio, cuando hablamos de Inteligencia Competitiva, nos enfocamos en el análisis de mercado, concretamente en las amenazas y oportunidades del entorno competitivo de una empresa. En esta línea, se trata de analizar un alto volumen de información que permita detectar patrones y tendencias en el mercado para desarrollar mecanismos de anticipación.

Así, por ejemplo, la Inteligencia Competitiva se ocupa de desarrollar la estrategia de innovación de la empresa, mejorar la toma de decisiones a partir de datos reales o establecer un sistema de gestión del conocimiento que permita a la empresa ser competitiva y mejorar su rendimiento.

Actualmente, muchas empresas utilizan herramientas de software de Business Intelligence y tecnologías como el Big Data y la Inteligencia Artificial para desarrollar estrategias que les permitan mejorar su competitividad. Para ello, la Inteligencia Competitiva debe ir de la mano de la gestión eficaz del conocimiento y la recopilación y procesamiento de datos.

Inteligencia económica

Influencia de la seguridad económica en un país

Cuando hablamos de Inteligencia Económica, es vital tener clara la importancia de la seguridad económica que aporta un país. Una idea de negocio puede verse afectada por el entorno económico y no llegar a triunfar, independientemente de que se adapte eficazmente a la cultura del nuevo mercado. El funcionamiento de las instituciones, la legislación en materia laboral, el sistema fiscal, la seguridad jurídica o la renta per cápita de un país son riesgos que vale la pena analizar a la hora de desarrollar negocios.

Así, por ejemplo, además del estudio de los datos macroeconómicos, puede ser de gran relevancia estudiar aspectos como el Índice de Libertad Económica, elaborado por el periódico estadounidense The Wall Street Journal y la Fundación Heritage. En estos indicadores se clasifican los países según una serie de variables, desde la eficiencia judicial a la carga fiscal o el gasto público, la facilidad para hacer negocios, el funcionamiento del sistema de trabajo o las normativas de comercio.

Existen también otros muchos estudios económicos estadísticos que permiten analizar el entorno económico y las oportunidades de negocio en distintos ámbitos. Las empresas deben valorar el papel que la seguridad económica supone a la hora de emprender un proyecto empresarial, o expandirse a otros países.

Los datos del entorno económico influyen en la consecución de objetivos y el desarrollo estratégico de cualquier organización. La Inteligencia Económica se enfoca en la recolección y análisis de datos estratégicamente útiles para que las empresas puedan descubrir oportunidades de negocio, o entender los riesgos que supone establecerse o seguir invirtiendo en determinados mercados.

Debe entenderse la Inteligencia Económica como un tipo de ingeniería del conocimiento orientado a dirigir la estrategia de inversión de las organizaciones, contemplando el perfil y las características de cada entorno geográfico y considerando tanto factores geoeconómicos, así como la situación política, social y económica de la sociedad en ese momento. Sin embargo, como hemos apuntado, la Inteligencia Económica no es suficiente si no existe una Inteligencia Competitiva.

Inteligencia Competitiva

Ciclo-fases de la inteligencia competitiva

Cuando hablamos de Inteligencia Competitiva, las empresas deben recopilar, analizar e interpretar diferentes datos para tener éxito en sus proyecciones y estrategias.

1. Determinar factores críticos de vigilancia (FCV)

El primer elemento esencial es determinar cuáles son los factores críticos de vigilancia. ¿Cuáles son los aspectos que pueden pasar en el entorno económico que afecten directamente a la empresa? ¿Qué recursos es necesario movilizar para poder hacer frente a los desafíos que esto supone?

2. Recogida de información

El siguiente paso para llevar a cabo la Inteligencia Competitiva es determinar los mecanismos a través de los que se va a recoger esta información.

Hoy día, las empresas capturan datos a través de múltiples herramientas digitales, que les permiten obtener información extraordinariamente precisa sobre el comportamiento del cliente, de forma que pueden anticipar su estrategia basándose en datos reales. Esto hace que muchas empresas puedan poner en marcha estrategias de Direct-To-Client y producción bajo demanda, a partir de previsiones que ayuden a evitar la especulación en la toma de decisiones, especialmente en el área de producción y en la compra de suministros.

3. Filtro de los resultados

Toda la información recopilada por cualquier medio debe ser validada, filtrada y autenticada. Muchas veces los procesos de análisis de datos no ofrecen una visión fidedigna de la realidad del mercado porque en los proyectos de Big Data se ha priorizado la cantidad de datos sobre la calidad de los datos, lo que da lugar a predicciones menos precisas y por tanto la inteligencia competitiva se ve afectada.

4. Distribución de la información

Los resultados de los análisis deben ponerse a disposición de los responsables en cada área en los que puedan ser útiles. Esto debe realizarse creando un flujo de comunicación automatizado entre los responsables de la gestión del conocimiento y las herramientas de software que se utilizan en cada departamento.

Así, por ejemplo, un Director de Marketing debe poder tener acceso a los datos de inteligencia competitiva que afectan a su área, de manera que pueda tomar decisiones eficaces en su ámbito. La información debe ser accesible y clara, no excesiva, de forma que pueda agilizar los procesos.

5. Establecer políticas de seguridad

Por último, es imprescindible tener en cuenta que toda la información relacionada con la Inteligencia Competitiva, la innovación y las oportunidades de mercado, debe ser gestionada y protegida de forma eficaz, atendiendo a su naturaleza estratégica. Las empresas deben tomar las medidas necesarias de seguridad para evitar el espionaje industrial, proteger sus desarrollos en curso y entender la Inteligencia Competitiva como un activo estratégico esencial de la organización.

Esperamos que ahora tengas más claro el concepto de Inteligencia Económica e Inteligencia Competitiva, y la importancia de desarrollar ésta para poder lograr ventajas que le permitan mejorar su posicionamiento en el mercado, adaptarse al desarrollo tecnológico y detectar nuevas oportunidades.